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INTELIGENCIA ARTIFICIAL, ¿POR QUÉ ES CLAVE PARA TU EMPRESA?
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Inteligencia Artificial

INTELIGENCIA ARTIFICIAL, ¿POR QUÉ ES CLAVE PARA TU EMPRESA?

El mundo empresarial está cambiando, y uno de los mayores impulsores de esta transformación es la tecnología. Entre las tecnologías que más impacto está teniendo en esta revolución digital y cuyo uso cada vez es más frecuente en las empresas, encontramos la Inteligencia Artificial (IA). En este campo son muchos los profesionales que coinciden en que esta tecnología se convertirá en una de las más útiles para el éxito de las organizaciones.

Y parte de su importancia radica en que con ella las empresas pueden analizar datos en tiempo real, desarrollar productos a la medida y personalizar los mensajes comerciales según el conocimiento que se tenga de cada cliente potencial.

 ¿Qué es la Inteligencia Artificial?

 Definamos la Inteligencia Artificial al nivel más básico como la capacidad de una máquina de analizar una serie de datos y llevar a cabo acciones que permitan realizar las tareas asignadas con la máxima eficiencia, e incluso aprender de los resultados para mejorar su propio proceso de análisis, emulando la inteligencia natural de los seres humanos.

Por tanto, la combinación de procesos científicos y lógicos permite a la Inteligencia Artificial analizar y resolver problemas de manera autónoma, partiendo siempre de algoritmos y paradigmas de naturaleza humana. Su objetivo es facilitar procesos y análisis para que la vida de las personas sea más fácil, y las tareas mucho más sencillas de realizar.

Ventajas del uso de Inteligencia Artificial en la empresa

 La Inteligencia artificial permite agilizar procesos, automatizar tareas cada vez más complejas y aumentar la seguridad en determinados sectores, pero estos no son los únicos beneficios que esta tecnología le brinda al mundo de los negocios:

Automatización de procesos: Tareas cotidianas y repetitivas como la carga de datos pasan a ser realizadas por Inteligencia Artificial, mejorando los procesos y dejando más tiempo a las personas para realizar otro tipo de trabajos donde son necesarias habilidades que no son capaces de recrear las máquinas.

Aumento de la productividad y la efectividad: Esta tecnología puede ofrecer asistencia y complementar así los procesos con una mayor eficiencia. Además, al aprender rápidamente de los datos y los procesos, las tareas que desempeña son cada vez más efectivas.

Procesamiento más eficiente, rápido y preciso de la información: Ante un gran nivel de datos a analizar, la IA permite analizar y sacar conclusiones, agilizando así la toma de decisiones. No solo eso, sino que las decisiones son decisiones de calidad y más precisas.

Innovación: Con procesos más inteligentes y autónomos, un aumento masivo de datos y una potencia de computación cada vez mayor, es el entorno perfecto para que los equipos humanos se centren en el área más creativa, ocupándose de la gestación de ideas y desarrollando productos y servicios más innovadores.

Aplicaciones más significativas en el sector empresarial
  • Análisis de datos: las empresas trabajan con grandes cantidades de datos de los que pueden obtener información relevante. Para ello, algunas compañías emplean sistemas que gestionan, ordenan y analizan datos no estructurados.
  • Finanzas: predecir fluctuaciones en el mercado bursátil, así como sus consecuencias, o reconocer riesgos de inversión que determinados clientes podrían representar son algunos de los usos de la IA en el ámbito financiero.
  • Venta cruzada: analizando los perfiles de los consumidores, sus gustos, su sexo, su edad, su historial de compras, zona de residencia, o lo que han comprado otras personas de su mismo perfil, la IA es capaz de buscar correlaciones y multiplicar la capacidad de acierto en la recomendación de productos a los usuarios que visitan una web.
  • Atención al cliente: cada vez son más comunes las empresas que integran chatbots en su página web, de esta forma, ofrecen un servicio de asistencia virtual completo y en tiempo real. Además, esta recogida de datos ayuda a conocer mejor al cliente potencial y de este modo elaborar las mejores estrategias de marketing.
  • Logística: hacer llegar los pedidos del almacén a los clientes puede suponer una gran diferencia en función de cómo se lleva a cabo el proceso. La Inteligencia Artificial permite optimizar aspectos como las rutas a seguir, el modo de carga de los vehículos, la gestión de la flota de reparto o el orden de entrega.
Inteligencia Artificial en acción

Aunque hoy en día según datos de la consultora SAS, solo un 20% de las grandes compañías europeas tienen en sus plantillas equipos de científicos de datos capaces de hacer frente a la IA, en todo el mundo hay alrededor de unas 7000 compañías que utilizan de forma activa esta tecnología y han logrado digitalizarse por completo gracias a ella.

Una de las últimas apuestas del gigante Google por la Inteligencia Artificial se ha materializado en la inversión en una agencia de noticias escritas por robots. Sin embargo, la idea de esta agencia no es que los robots actúen como sustitutos o competidores de los periodistas, sino como un recurso más para ellos.

La Inteligencia Artificial también está presente en la estrategia de Tesla, y es que la empresa automovilística lo ha aprovechado para centrarse en dos áreas: propulsión eléctrica total y conducción autónoma. A través de sus chips de IA autogenerados, la empresa tiene como objetivo garantizar que los automóviles puedan navegar no solo a través de las autopistas sino también a través de las calles locales.

Por otro lado encontramos a la compañía Uber, la cual emplea IA para comprobar que la persona que conduce el coche es un conductor autorizado, interpretando el significado de los datos incluyendo voz e imagen. Además, la usa para emparejar conductores y pasajeros, optimizar rutas, así como en varias partes restantes de su aplicación.

Ciertamente la inversión que se requiere para poner en marcha un proyecto de IA no siempre está al alcance de cualquier negocio, pero este coste se verá compensado en las grandes oportunidades de diferenciación que aportará a la compañía, en el aumento de su competitividad y en todo lo que implicará conseguir una estrategia 100% digital.